Los venenos en la magia, el esoterismo y las prácticas de sanación antiguas, y los Venenos Cuánticos en Bioingeniería Cuántica
A lo largo de la historia, los venenos han jugado un papel crucial en diversas culturas, no solo como agentes de destrucción, sino también como herramientas en la magia, el esoterismo y las prácticas de sanación. Las civilizaciones antiguas utilizaban estos venenos por su capacidad dual: tanto para causar daño como para curar. El uso de los venenos en rituales mágicos y terapias de sanación estuvo profundamente conectado con la comprensión espiritual y energética de la vida. En la Bioingeniería Cuántica, particularmente en la especialidad de Tenebris, esta antigua sabiduría ha sido adaptada y ampliada, permitiendo el trabajo con lo que llamamos Venenos Cuánticos. A diferencia de los venenos tradicionales, los Venenos Cuánticos son patrones energéticos que, en lugar de afectar directamente el cuerpo físico, actúan a nivel cuántico, influyendo en el campo electromagnético y los sistemas energéticos de las personas para sanar, purificar y transformar.
1. Venenos en la magia y la alquimia
Los venenos han estado presentes en la alquimia y la magia desde tiempos antiguos, debido a su capacidad para transformar y transmutar energías y materias. En los textos alquímicos, sustancias venenosas como el arsénico y el mercurio eran estudiadas no solo por su toxicidad, sino también por su capacidad para alterar el mundo material y espiritual. Los alquimistas consideraban que los venenos contenían un gran poder para purificar y evolucionar el alma, ya que el veneno, al igual que el fuego, podía destruir lo viejo para dar paso a lo nuevo.
En la Bioingeniería Cuántica, trabajamos con el concepto de Venenos Cuánticos siguiendo esta misma premisa de transmutación. Los Venenos Cuánticos actúan como catalizadores de cambios energéticos, ayudando a disolver bloqueos en el campo electromagnético de la persona y permitiendo la regeneración de patrones energéticos coherentes. A través de la resonancia cuántica de estos venenos, es posible liberar información tóxica que ha quedado estancada en el cuerpo o el campo energético.
2. Los venenos en las prácticas chamánicas y curativas
En las culturas chamánicas, el uso de venenos era considerado un medio para conectar con lo divino y acceder a conocimientos ocultos. Plantas como la ayahuasca, el peyote y la belladona eran utilizadas para inducir estados alterados de conciencia, permitiendo a los chamanes viajar a otros planos de existencia y obtener información valiosa para la sanación de su comunidad. Además, los chamanes usaban pequeñas dosis de venenos de animales, como las toxinas de serpientes y ranas, para reforzar la salud y fortalecer la conexión con los espíritus protectores.
En la especialidad de Tenebris de Bioingeniería Cuántica, el trabajo con Venenos Cuánticos permite acceder a estas frecuencias energéticas sin necesidad de consumir las sustancias físicas. Al acceder a la información cuántica de estos venenos, es posible desbloquear traumas profundos o liberar cargas emocionales que están atrapadas en el campo electromagnético, permitiendo que la energía fluya de nuevo de manera armoniosa.
3. El veneno como símbolo de poder y protección
En muchas culturas antiguas, los venenos estaban asociados con poderes de protección y defensa espiritual. Amuletos de serpientes, escorpiones y otros animales venenosos eran usados para repeler el mal y proteger a quienes los portaban. En el Antiguo Egipto, por ejemplo, la diosa Serket, que estaba relacionada con los escorpiones, era invocada para proteger a las personas de picaduras venenosas, y se creía que su energía podía sanar heridas y purificar el cuerpo.
En Bioingeniería Cuántica, los Venenos Cuánticos actúan como guardianes energéticos, protegiendo el campo cuántico de la persona de influencias externas negativas. Al activar la resonancia de un Veneno Cuántico en el sistema energético de una persona, es posible generar una barrera protectora que impida la entrada de energías disruptivas o entidades no deseadas.
4. El uso ritual de plantas venenosas
Muchas plantas venenosas, como la mandrágora, la belladona y el estramonio, fueron ampliamente utilizadas en rituales mágicos debido a sus propiedades alucinógenas y curativas. Se creía que estas plantas permitían a los practicantes de la magia acceder a estados de trance y visión, facilitando la comunicación con fuerzas sobrenaturales o divinas. La mandrágora, en particular, era considerada una planta con poderes místicos capaces de atraer el amor, la riqueza y el éxito, pero su recolección y uso debían hacerse con sumo cuidado debido a su toxicidad.
En la especialidad de Tenebris, el uso de Venenos Cuánticos derivados de estas plantas permite acceder a sus propiedades vibracionales sin los riesgos asociados a su consumo físico. Esto significa que es posible canalizar la energía de estas plantas para promover la transformación personal, la elevación de conciencia y la purificación energética de forma segura y controlada.
5. Venenos en las prácticas de sanación antiguas
Los venenos también han sido utilizados en las primeras prácticas médicas y terapéuticas, desde la Grecia clásica hasta la China antigua. Sustancias como el opio, el heléboro y el arsénico se utilizaban para tratar desde trastornos del sueño hasta enfermedades de la piel. Los médicos antiguos entendían que los venenos, en dosis controladas, podían tener efectos terapéuticos sorprendentes.
En Bioingeniería Cuántica, los Venenos Cuánticos extraen la información vibracional de estas sustancias para trabajar a nivel energético y cuántico. Esto permite tratar patrones de enfermedad que están arraigados en el campo energético del individuo, restaurando el equilibrio electromagnético y promoviendo una mayor coherencia en el cuerpo y la mente.
Beneficios de los Venenos Cuánticos en Bioingeniería Cuántica
El trabajo con los Venenos Cuánticos dentro de la Bioingeniería Cuántica ofrece numerosos beneficios terapéuticos y espirituales, entre los que se incluyen:
Transformación y purificación energética: Los Venenos Cuánticos actúan como catalizadores para disolver bloqueos energéticos y liberar información tóxica en el campo cuántico de la persona.
Protección cuántica: Estos venenos vibracionales generan una barrera protectora que impide la entrada de influencias externas negativas, ayudando a estabilizar el campo energético de la persona.
Acceso a estados elevados de conciencia: Al trabajar con la resonancia cuántica de plantas y animales venenosos, es posible acceder a planos superiores de percepción y conocimiento, facilitando la introspección y el crecimiento espiritual.
Regeneración del campo electromagnético: Los Venenos Cuánticos ayudan a restaurar la coherencia en el campo electromagnético del cuerpo, lo que promueve la sanación a nivel físico, emocional y espiritual.
Liberación de traumas profundos: Estos venenos pueden desbloquear traumas emocionales y energéticos que han quedado atrapados en el sistema cuántico, permitiendo la liberación y el proceso de sanación profunda.
Reequilibrio de sistemas energéticos: Actúan en la alineación de los sistemas energéticos del cuerpo, ayudando a la persona a recuperar su estado natural de equilibrio y bienestar.
Conclusión
Los venenos han sido venerados y temidos a lo largo de la historia por su capacidad para causar daño o promover la sanación. En la Bioingeniería Cuántica, especialmente en la especialidad de Tenebris, los Venenos Cuánticos representan una evolución de este conocimiento ancestral, permitiendo trabajar con su información vibracional para sanar, proteger y transformar sin los riesgos asociados a su toxicidad física. Estos venenos cuánticos abren la puerta a un profundo trabajo energético, promoviendo la armonización y la regeneración del campo cuántico del ser humano.
Sandra Fernández
Bienvenido a la especialidad de Tenebris de Bioingeniería Cuántica, el veneno como antídoto próximo 29 de Septiembre 2024, acceso: https://bioingenieriacuantica.com/formacion-tenebris-el-veneno-como-antidoto
Gracias por invitarme al curso ,me fue imposible asistir a la clase, me llamaron para realizar un trabajo.pido una disculpa . Muchas Gracias
Gracias por tu generosidad. Por estos apuntes con los cuales sigo aprendiendo hasta que mi latir esté cansado. Un abrazo.