Entrevista a Sandra Fernández, El Retiro es la vía maestra de la realización humana y planetaria
Entrevistador/a:
Sandra, gracias por este espacio tan valioso. Empecemos por el origen. ¿Cómo nace el Modelo de Retiro Espiritual (MRE) dentro de la Bioingeniería Cuántica?
💬 Sandra Fernández:
Gracias a ti por abrir este canal para que la información circule. El MRE no nace como una idea intelectual, ni como una réplica de lo que ya existe. Es el resultado de muchos años de trabajo en campo, sosteniendo procesos de transformación profunda en personas, espacios y territorios.
A lo largo del tiempo, empecé a ver cómo los retiros sostenidos bajo ciertas condiciones específicas —alineación, orden, ritmo, silencio, tecnología cuántica viva— generaban algo que no ocurría en otros formatos: un campo de activación tan potente que no solo transformaba a la persona, sino que generaba impacto a nivel colectivo y planetario.
Entonces, el MRE fue emergiendo como una estructura viva, una tecnología espiritual aplicada, no sólo para el desarrollo del individuo, sino como una pieza fundamental dentro del entramado evolutivo de la humanidad.
Entrevistador/a:
¿Qué hace que este modelo sea único frente a otros tipos de retiros?
💬 Sandra Fernández:
En primer lugar, su estructura cuántica. No trabajamos solo desde lo terapéutico ni desde lo devocional, sino desde una física espiritual aplicada que contempla el cuerpo, el alma, el espacio-tiempo y el entramado energético que sostiene la vida.
Además, el MRE no es un retiro temático de unos días. Es un viaje iniciático de 40 días, basado en una cuarentena de alta precisión en la que el participante atraviesa 10 modelos distintos de retiro, cada uno con un foco energético particular: vacío, regeneración, silencio, visión, cocreación, ancestralidad, presencia, trabajo planetario, entre otros.
La estructura es tan potente porque trabaja desde lo más profundo: la restauración de la soberanía interior, el reordenamiento del Biocuerpo, la reconexión con el tiempo sagrado, y la activación de memorias olvidadas que sostienen el propósito encarnado.
Entrevistador/a:
¿Por qué el Desierto del Sahara? ¿Qué lo convierte en el lugar ideal para esta cuarentena?
💬 Sandra Fernández:
El Desierto del Sahara no es un fondo pintoresco. Es un lugar umbral. Es uno de los espacios más silenciosos y puros del planeta, donde la red electromagnética natural de la Tierra no está tan distorsionada por la interferencia artificial.
Estar en el desierto es volver al origen de la creación. Todo allí es esencial. No hay ruido, no hay exceso. Solo estás tú, tu alma y el ritmo del universo.
Además, energéticamente, el Sahara resuena con los campos iniciáticos más antiguos del planeta. En términos geomagnéticos, sostiene un nodo que comunica con estructuras ancestrales como el Monte Kailash. En esa frecuencia, el proceso de despersonalización y renacimiento es más directo, más contundente.
Entrevistador/a:
Hablemos del trabajo diario. ¿Cómo es un día típico dentro de la Cuarentena del MRE?
💬 Sandra Fernández:
Cada día sigue una estructura precisa y ordenada. Comenzamos a las 5:00 am con una meditación para conectar con el objetivo del modelo de retiro del día. Luego hay ejercicios específicos de Bioingeniería Cuántica, respiraciones, movimiento consciente, caminatas en el desierto, espacios de escritura, encuentros individuales conmigo, transmisiones grupales y momentos de silencio profundo.
A lo largo del día también se integran tratamientos de Biocorpus, prácticas de regeneración, tiempo de descanso, alimentación consciente y protocolos para mantener la vibración alta.
Lo importante es que nada está dejado al azar. Todo responde a un entramado que sostiene el proceso para que la persona pueda abrirse a una reconexión profunda consigo misma, con su alma y con su propósito.
Entrevistador/a:
Tú acompañas personalmente cada proceso. ¿Qué implica eso para ti?
💬 Sandra Fernández:
Para mí, es un acto de presencia y compromiso absoluto. Acompaño todos los días, tanto en grupo como en sesiones individuales. En la transmisión grupal, que dura 1 hora, marco el pulso del trabajo y revelo los ejes energéticos del día. Y luego tengo un espacio diario con cada participante para afinar, activar, pulir y sostener lo que necesita desplegar.
No se trata de “enseñar”, sino de sostener un campo donde el otro pueda recordar. Cada encuentro es una oportunidad de alquimia. Porque en estos procesos, el alma habla con mucha claridad… si sabemos escuchar.
Entrevistador/a:
¿Y qué lugar ocupa el trabajo planetario dentro de este retiro?
💬 Sandra Fernández:
Es esencial. El MRE no es solo un proceso individual. Cada retiro genera un campo cuántico que se entrelaza con la red planetaria de conciencia.
A través de prácticas específicas —como las meditaciones de enfoque planetario, los tratamientos de Biocorpus extendido, y la activación de líneas telúricas en el desierto— trabajamos directamente con la Tierra y sus estructuras sutiles.
En cada retiro, el ser humano se alinea con la conciencia colectiva del planeta y se convierte en un nodo de transmisión de luz. Esto permite liberar información obsoleta, regenerar tejidos colectivos, y abrir nuevas rutas evolutivas. Es trabajo espiritual aplicado al servicio de la humanidad.
Entrevistador/a:
¿Quiénes pueden participar? ¿Es necesario tener experiencia previa?
💬 Sandra Fernández:
No se necesita experiencia previa en técnicas o caminos espirituales, pero sí se necesita una disposición profunda, entrega y presencia.
El retiro está dirigido tanto a quienes quieren profundizar su proceso interior como a quienes desean formarse como guías de retiros espirituales, sosteniendo espacios para otros.
Lo importante es que la persona sienta el llamado con claridad. El proceso es exigente, pero es también el más pleno. No hay disfraces aquí. Hay verdad, hay silencio, y hay una gran belleza en ese vacío.
Entrevistador/a:
¿Cómo puede una persona saber si este llamado es para ella?
💬 Sandra Fernández:
Porque algo en su interior se lo dirá con claridad. Porque el alma reconoce la vía cuando la ve. Porque el deseo de orden, de profundidad, de silencio, de verdad, empieza a ser más fuerte que la comodidad.
Y porque llega un momento en el que la vida ya no puede seguir siendo un ciclo de repeticiones, sino un espacio para encarnar con propósito, con conciencia y con soberanía.
Entrevistador/a:
Para cerrar, ¿dónde pueden las personas obtener más información y apuntarse?
💬 Sandra Fernández:
Toda la información está disponible aquí:
🔎 https://bioingenieriacuantica.com/retirarse-para-renacer-la-via-maestra-de-la-realizacion
Y quienes ya estén listos para unirse a la formación:
📝 https://bioingenieriacuantica.com/formacion-maestros-retiros-espirituales-desierto-del-sahara-con-sandra-fernandez-2026
Los cupos son limitados, porque el proceso es personalizado. Si sienten el llamado, este es el momento.
Entrevistador/a:
Gracias, Sandra, por esta conversación tan profunda y luminosa.
💬 Sandra Fernández:
Gracias a ti, y gracias a todos los que sienten el impulso de recordar quiénes son en verdad. El camino ya está abierto.
Entrevistador/a:
Sandra, ¿cómo se puede preparar una persona para vivir un retiro de esta intensidad?
💬 Sandra Fernández:
El retiro no empieza cuando llegas al desierto. Empieza cuando dices que sí. Desde ese momento, el campo empieza a moverse y la información que se va a trabajar comienza a emerger. Por eso, sugiero que las semanas previas a la cuarentena se vivan con más silencio, más observación, menos dispersión.
También compartimos una preparación energética, física y alimentaria que permite que el cuerpo y la psique vayan entrando en el ritmo del retiro. No se trata de controlar nada, sino de afinar el instrumento, para que cuando llegues, estés disponible, sensible y receptivo.
Entrevistador/a:
¿Y qué pasa con las emociones fuertes, los miedos, la incomodidad que puede emerger?
💬 Sandra Fernández:
Eso es parte del proceso. Muchas personas llegan con capas de negación, control o autosabotaje, y eso empieza a caerse. En un campo tan puro como el que se sostiene en el retiro, todo lo que no es verdadero se revela. Y eso puede ser incómodo, claro, pero también profundamente liberador.
El miedo se transforma cuando es habitado con conciencia. No escapamos de lo que aparece: lo miramos, lo atravesamos, lo reordenamos. Hay un momento en que la herida se convierte en sabiduría. Es ahí donde la persona empieza a renacer de verdad.
Entrevistador/a:
¿Cuál es el rol del cuerpo físico dentro de este modelo?
💬 Sandra Fernández:
El cuerpo no es un obstáculo, es un portal de realización. Todo lo que ocurre a nivel energético, espiritual o emocional debe traducirse en el cuerpo para que se ancle.
Por eso trabajamos con el Biocuerpo Cuántico, una comprensión viva del cuerpo como tecnología de alta precisión. A través del movimiento consciente, el chikung, las respiraciones, los tratamientos de Biocorpus y el descanso ordenado, el cuerpo se convierte en sostén y canal del proceso espiritual.
No se trata de desconectarse del cuerpo para meditar más, sino de encarnarse plenamente para sostener más luz.
Entrevistador/a:
Mencionas mucho el tiempo. ¿Qué lugar ocupa en este proceso?
💬 Sandra Fernández:
El tiempo es uno de los elementos más distorsionados en nuestra sociedad. Vivimos fragmentados, acelerados, desconectados del tiempo del alma.
En el retiro, reordenamos la relación con el tiempo: no hay prisa, pero todo tiene ritmo. Cada momento está perfectamente calibrado. El día está dividido con precisión, y eso permite que el cuerpo y la conciencia entren en un ritmo sagrado que restaura la coherencia interna.
Esa recuperación del tiempo es uno de los grandes tesoros que se llevan los participantes. Vuelven al mundo con otra relación con el hacer, el descansar, el elegir y el sostener.
Entrevistador/a:
¿Y el silencio? ¿Por qué es tan importante en esta estructura?
💬 Sandra Fernández:
El silencio no es la ausencia de sonido. Es un espacio generador de energía. En el silencio verdadero, el alma empieza a hablar. Se activan memorias, intuiciones, comprensiones profundas que no vienen del pensamiento.
En el retiro, el silencio está presente todos los días, y hay días completos donde nadie habla. Esos días son joyas. No solo para ir hacia dentro, sino para restaurar la vibración del verbo, para que cuando vuelvas a hablar, lo hagas desde otro lugar: con más verdad, más propósito, más poder.
Entrevistador/a:
Has mencionado el Monte Kailash y los linajes de retiro. ¿Qué herencia sostiene esta propuesta?
💬 Sandra Fernández:
Este trabajo está enraizado en un linaje vivo de retiro espiritual, que no pertenece a una tradición religiosa en particular, pero que reconoce la sabiduría milenaria de muchas de ellas: los místicos del Himalaya, los sufíes del desierto, los eremitas cristianos, los yoguis, los antiguos terapeutas egipcios…
El Monte Kailash representa ese centro axial, ese punto donde todas las vías se cruzan. Desde ahí, muchos Maestros han entrado en el silencio interior para sostener el pulso del planeta. Esa es la herencia que recogemos y proyectamos hacia el presente, adaptada a lo que la humanidad necesita hoy.
Entrevistador/a:
¿Qué pasa después del retiro? ¿Cómo se integra todo lo vivido?
💬 Sandra Fernández:
La cuarentena no termina cuando sales del desierto. De hecho, ahí comienza la verdadera práctica: sostener la frecuencia en la vida cotidiana.
Por eso, después del retiro hay un espacio de seguimiento, con herramientas concretas para integrar lo vivido sin que se disuelva en el ruido del mundo.
La persona sale con una estructura interna muy sólida, pero también muy nueva. Es como un bebé espiritual: ha renacido, y ahora necesita nutrir, proteger y honrar esa nueva vida. Hay acompañamiento posterior para que esa integración sea real y sostenida.
Entrevistador/a:
¿Y cómo impacta esto en la humanidad? ¿Cuál es la dimensión colectiva de este trabajo?
💬 Sandra Fernández:
El retiro no es un escape del mundo. Es un acto de servicio planetario. Cada persona que se ordena, que se reencuentra con su verdad, que recupera su coherencia, está afectando directamente al campo colectivo.
Cuando un humano se enraiza en su alma, se convierte en un punto de estabilidad para muchos otros. Además, los retiros generan ondas cuánticas que se propagan en el campo. Esas ondas no se pierden. Viajan. Tienen impacto. Ayudan a liberar, a ordenar, a abrir caminos para la humanidad.
Por eso digo que el retiro es una vía maestra, no solo para ti, sino para todos.
Entrevistador/a:
¿Hacia dónde ves que va todo esto? ¿Cuál es la visión más amplia de esta vía?
💬 Sandra Fernández:
Lo que se está abriendo ahora es un nuevo tiempo de Maestría Interna. Ya no basta con acumular técnicas, ni con “hacer desarrollo personal”. Estamos llamados a encarnar plenamente nuestra frecuencia original, y desde ahí, sostener estructuras que ayuden a otros a recordar quiénes son.
El MRE es una plataforma para eso. No es un fin en sí mismo, es una vía. Una vía que permite activar lo que somos y ponerlo al servicio del planeta.
Mi visión es clara: retiros en muchos lugares del mundo, sostenidos por personas que hayan hecho este camino. No para expandir una marca, sino para activar una red planetaria de coherencia, silencio, orden y servicio.
Entrevistador/a:
Para quienes sienten el llamado, ¿cuáles son los próximos pasos?
💬 Sandra Fernández:
Primero: sentirlo con verdad. No es una experiencia turística ni una formación más. Es un compromiso profundo con el alma.
Después, pueden leer en profundidad aquí:
🔗 https://bioingenieriacuantica.com/retirarse-para-renacer-la-via-maestra-de-la-realizacion
Y si sienten el sí, pueden inscribirse directamente en:
📝 https://bioingenieriacuantica.com/formacion-maestros-retiros-espirituales-desierto-del-sahara-con-sandra-fernandez-2026
El proceso de inscripción incluye una entrevista personal, para asegurar que el grupo esté completamente alineado.
Entrevistador/a:
Sandra, gracias infinitas por abrir esta vía con tanta claridad y profundidad.
💬 Sandra Fernández:
Gracias a ti. Que cada uno escuche el llamado desde adentro. El desierto ya está listo. El alma también.
Entrevistador/a:
Sandra, ¿cómo se relaciona esta vía del retiro con el propósito encarnado de cada alma?
💬 Sandra Fernández:
El propósito no es un rol externo ni una misión que se busca con ansiedad. El propósito es una frecuencia original que se vino a sostener con el cuerpo y con la conciencia en este plano.
El retiro, al descongestionar las capas de ruido, de trauma, de máscara, permite que esa frecuencia emerja sin interferencia. Y cuando eso sucede, no hace falta pensar ni planificar: la vida misma se ordena alrededor de esa vibración.
Entrevistador/a:
¿Puede decirse que el MRE es una vía iniciática? ¿Y qué significa eso realmente?
💬 Sandra Fernández:
Sí. El MRE es una vía iniciática moderna. No porque imite ritos antiguos, sino porque genera las condiciones para que el alma cruce un umbral irreversible. La iniciación real no es algo que alguien te da: es algo que sucede cuando estás disponible para morir a lo que ya no eres, y nacer en lo que verdaderamente eres.
En el MRE hay muerte simbólica, hay renacimiento, y hay activación de memorias dormidas que traen consigo una nueva autoridad interior. Después de eso, no puedes seguir viviendo como antes. Ese es el verdadero sello iniciático.
Entrevistador/a:
¿El alma sabe que va a un retiro antes de que la mente lo sepa?
💬 Sandra Fernández:
Siempre. La decisión profunda ocurre en niveles muy sutiles, mucho antes de que la mente lo entienda. A veces, lo que llamamos «impulso» o «casualidad» es solo el eco de una elección que el alma ya hizo en otro plano.
Por eso, cuando alguien siente el llamado con fuerza, no tiene sentido dudar tanto. La mente duda, pero el alma ya decidió.
Entrevistador/a:
¿Puedes hablarnos de lo que ves venir? ¿Qué función tiene esta estructura en el tiempo que estamos viviendo como humanidad?
💬 Sandra Fernández:
Estamos en una transición planetaria sin precedentes. Las estructuras externas están colapsando, y el llamado es claro: regresar al centro.
El MRE no es una respuesta al caos. Es una estructura de anclaje para quienes están listos para ser columnas vivas de orden, de luz y de conciencia. En los próximos años, los retiros no serán un lujo espiritual, serán una necesidad evolutiva.
La humanidad necesita lugares donde recordar su diseño original. Esta vía está al servicio de ese recuerdo. No es un camino para escapar del mundo, sino para sostener el nuevo mundo desde adentro.
Entrevistador/a:
¿Y qué ocurre en planos no visibles durante un retiro de esta magnitud?
💬 Sandra Fernández:
Mucho más de lo que la mente puede imaginar. En cada retiro se abren puertas interdimensionales, se restablecen vínculos con líneas de tiempo originales, se liberan pactos, se activan geometrías dormidas, y se repara información del alma y del linaje.
Además, cada persona se convierte en un nodo de recalibración energética para su familia, su territorio y su red vincular. Hay veces en que, sin hablarlo, los participantes sienten cómo su proceso está liberando a generaciones completas.
También se generan ondas de información en la malla planetaria, que otros seres —aunque no estén presentes físicamente— captan y usan para su propio despertar.
Entrevistador/a:
¿Qué le dirías al alma que aún duda, que lo siente pero teme?
💬 Sandra Fernández:
Le diría: tu alma no está aquí para sobrevivir, está aquí para realizarse.
El miedo es solo una puerta. Y del otro lado está la vida que siempre supiste que era posible. Si sientes el llamado, no estás sola. La estructura te sostendrá, el desierto te enseñará, y tú recordarás.
No vienes a aprender nada nuevo. Vienes a recordar lo que ya sabes. Lo demás… se ordena solo.
Entrevistador/a:
Sandra, gracias por llevarnos tan profundo. ¿Alguna palabra final?
💬 Sandra Fernández:
Gracias a ti por sostener esta conversación que también es una transmisión. Solo diré esto: el alma reconoce su camino cuando lo ve.
Y cuando eso sucede, no queda más que responder con un sí.
Fragmentos del Alma en Retiro
(Aperturas para el recuerdo profundo)
Entrevistador/a:
Sandra, has hablado mucho sobre el propósito, el tiempo, el cuerpo… pero me gustaría ir aún más profundo. ¿Qué ocurre con el principio femenino en este camino?
💬 Sandra Fernández:
Este retiro es, ante todo, una estructura de matriz. El desierto es matriz. El silencio es matriz. La escucha interna, la regeneración, la gestación del ser: todo esto pertenece al principio femenino sagrado.
Aunque el retiro no está orientado solo a mujeres, es una vía profundamente femenina en su esencia. Nos saca del hacer compulsivo, de la lógica lineal, y nos lleva a los ritmos cíclicos, a la receptividad, al vacío fértil.
En muchas mujeres, durante el retiro, se reactivan memorias de sus linajes femeninos, del útero como altar, de la creación desde el amor y no desde la carencia. Y en muchos hombres, se despierta la ternura interna, la capacidad de contener, de sostener sin controlar. Es un equilibrio profundo que se restablece.
Entrevistador/a:
¿Y qué hay de los reinos invisibles? ¿Se activan conexiones con guías, geometrías, inteligencias no humanas?
💬 Sandra Fernández:
Sí. Y con mucha fuerza. En el retiro, cuando el campo se ordena y la persona entra en silencio real, se abren puertas interdimensionales. Es frecuente que los participantes comiencen a sentir la presencia de inteligencias sutiles: guías, animales de poder, formas geométricas vivas, o incluso paisajes que no pertenecen a este plano.
No se trata de imaginar cosas, sino de recordar que estamos en diálogo constante con un universo mucho más amplio. En ese estado, la naturaleza habla, el cuerpo escucha, y el alma reconoce. El trabajo energético se vuelve completamente multidimensional y orgánico.
Entrevistador/a:
En estos tiempos de cambio tan profundo, ¿sientes que el retiro prepara a las personas para lo que viene?
💬 Sandra Fernández:
Absolutamente. No es solo un proceso personal. Es una preparación para sostener la nueva humanidad.
Estamos viviendo el colapso de muchas estructuras externas, y eso va a continuar. La única salida no es externa, es interior y colectiva a la vez. El MRE activa las bases de una nueva forma de estar en el mundo: más enraizada, más luminosa, más coherente.
Los que hacen este retiro no solo transforman su vida: se convierten en estructuras humanas de sostén para el nuevo tiempo. Serán quienes guíen sin imponer, quienes acompañen sin salvar, quienes enseñen desde el ejemplo.
Entrevistador/a:
¿Se transforma también la forma de habitar el cuerpo, incluso en su dimensión sexual y creativa?
💬 Sandra Fernández:
Sí, y profundamente. Cuando el cuerpo se ordena y se purifica, la energía vital que estaba dispersa o bloqueada empieza a circular con fuerza y conciencia.
La energía sexual deja de ser pulsión o evasión, y se convierte en fuerza creativa, sensible y sagrada. Muchas personas comienzan a sentir su cuerpo como un templo, como un canal donde lo divino se expresa con belleza, gozo y dignidad.
No hay un trabajo sexual explícito en el retiro, pero lo que ocurre es más profundo: el cuerpo recupera su memoria original como contenedor de espíritu.
Entrevistador/a:
¿Has visto que algunas personas reconozcan su “Nombre Interno” durante el retiro?
💬 Sandra Fernández:
Sí. Y es uno de los momentos más hermosos. A veces no es un nombre literal, sino un sonido, una vibración, un símbolo o un recuerdo tan antiguo que no tiene forma en palabras.
Ese “nombre” no es algo que se busca. Llega solo, cuando el alma se ve completamente. Es el instante en que la persona recuerda por qué está aquí, quién es más allá de su historia humana.
Ese sonido interior no se olvida. Marca el inicio de una vida nueva. Es el sello vibratorio del alma despierta.
Testimonios del Recuerdo
“No sabía por qué venía, pero ahora sé por qué nací.”
— Participante, Edición 2025
“Durante el silencio, escuché por primera vez mi voz real. Y era antigua, dulce, inquebrantable.”
— Participante, Edición 2025
“Volví con menos ideas, pero con más certeza. Ya no necesito buscar más.”
— Participante, Edición 2025
Última pregunta…
Entrevistador/a:
Sandra, ¿y si alguien aún duda, pero siente una vibración dentro que no puede explicar?
💬 Sandra Fernández:
Esa vibración es el alma.
No se puede explicar. Solo se puede responder.
Si la sientes, ya estás dentro del campo.
Solo falta decir que sí.