Cuántica en el Desierto. Cuando hablamos de información cuántica en Bioingeniería Cuántica
Los pioneros de la física cuántica observaban que el Universo subatómico y nuestra relación con la materia era crucial, las partículas subatómicas responden a un estado de potencial abierto a todas las posibilidades hasta que nosotros las alteramos al observarlas o medirlas.
Bioingeniería Cuántica lo que hace es un manejo consciente de esta alteración y para ello entrena a personas de todo sector profesional para convertirlas en terapeutas a través de aprender a observar de la forma adecuada.
Nuestra conciencia permite que el flujo subatómico se estabilice creando realidad. La conciencia se entrena y esto es lo que hacemos en Bioingeniería Cuántica.
Las implicaciones de la física cuántica en la calidad de vida de las personas, su salud y bienestar son de una proyección ilimitada, pero es necesario llevar estos descubrimientos al plano accesible de las personas y que pasen de ser únicamente aplicables a bombas o ingenios electrónicos modernos hacia el beneficio común del ser humano y el planeta.
El vasto campo de trama invisible en el que estamos envueltos responde a nuestro observador y frecuencia y a patrones de orden y coherencia presentes en toda la naturaleza.
Una vez que se conoce el mapa y las herramientas, así como la forma de aplicarlas, es algo que toda persona y hasta los niños pueden aprender para el bien común.
Nosotros los seres humanos somos paquetes de energía cuántica interaccionando con este océano de información. Lo que yo descubrí es que hay una forma fácil, directa y eficaz de comunicar con este campo tanto para saber, como para reajusta la coherencia y el orden.
En el pulso del corazón descubrí esta herramienta que llama © PCT (Pulso Cuántico Toroidal) y que es el pulso de información cuántica que está vehiculizado por el pulso cardíaco que todos tenemos.
Sandra Fernández